Como cada 8 de marzo, el Cuerpo de Bomberos de Melilla ha celebrado el día de su patrón, San Juan de Dios. Para ello, han acudido al cementerio de La Purísima Concepción para la ofrenda floral que se realiza cada año a Manuel Lirola Simó y Pedro Pérez Torregosa, bomberos que fallecieron en acto de servicio el 3 de mayo de 1944, en el incendio de la ferretería Cabanillas. También murió el obrero de aviación, Antonio Albertu, en este incendio.
El presidente de la Ciudad Autónoma, Eduardo de Castro, ha estado presente en el acto junto a los bomberos que tras escuchar la historia del incendio de 1944, se ha hecho entrega de las tres coronas y se ha guardado silencio en memoria de los tres hombres fallecidos.