
Hoy se ha presentado el nuevo aspecto del cementerio musulmán tras las obras de mejora del Gobierno local que han costado 488.000 euros.
Los trabajos han permitido aumenta el número de sepulturas, habilitar un aparcamiento con 43 plazas y una mejora de las oficinas para los trabajadores.Este proyecto se ha alargado durante tres años y ha contado con dos empresas encargadas del mismo.
El consejero de Medio Ambiente destaca que ya trabajan en una ampliación tanto de los terrenos como de las instalaciones debido a la fuerte afluencia de personas que hay en el templo.
Los presupuestos de 2020 ya cuentan con una partida para comenzar las obras de ampliación de las oficinas. Para ampliar terrenos, el Ejecutivo ya está en conversaciones con los dueños de las zonas anexas y espera alcanzar un acuerdo con un precio razonable.