La viceconsejera de Cultura, Elena Fernández Treviño, ha acudido a esta presentación de uno de los principales exponentes de la artesanía bereber desde todos los tiempos, la joyería. Las joyas son consideradas un símbolo de belleza, pero dentro del Islam, con el rechazo a la representación corporal de seres humanos, tienen una simbología muy rica, esquemática y abstracta.
Las fíbulas, desde la prehistoria, son utilizadas por las mujeres para sujetar el velo sobre el pecho. Las que tiene una forma triangular tienen un valor mágico y protector porque representa al ojo y al género femenino. Treviño ha invitado a los melillenses a que disfruten de la riqueza cultural de los museos de Melilla.